Autora: Luisa Eugenia Reyes Recio, profesora Titular de Dirección y Organización de Empresas. Especialista en Dirección ágil de proyectos e iniciativas empresariales para la innovación de los modelos de negocio. Design Thinker.
Recientemente tras la búsqueda de literatura especializada en la gestión del talento y agilidad de aprendizaje, encontraba el trabajo publicado por Deepa, Sujatha & Baber (2021) en la revista International Journal olf Lifelong Education. Un trabajo que pone de manifiesto que las innovaciones tecnológicas están en el centro de las fuerzas educativas que modifican la dinámica del mercado de trabajo y de las habilidades necesarias de los empleados tanto para su incorporación, como para el mantenimiento en el sistema laboral. Las tecnologías de la información han permitido una educación abierta, en línea, remota o a distancia; con oportunidades para el aprendizaje permanente facilitando conocimiento e información. Sin duda, la tecnología puede proporcionar el aprendizaje permanente al personalizarlo para satisfacer las necesidades de los estudiantes de todos los grupos de edad.
Es conocido que todos regresaremos a la educación varias veces a lo largo de nuestras carreras profesionales. Sin embargo, una revisión de la literatura muestra que se han utilizado los conceptos de aprendizaje a lo largo de la vida y la educación a lo largo de la vida como términos sinónimos; cuando éstos no lo son. Los autores indican que si bien la educación permanente implica crear disposiciones para que los adultos puedan adquirir nuevas habilidades mediante la participación en actividades educativas intencionales durante el curso de sus carreras profesionales, el aprendizaje permanente es un proceso que va más allá de lo que surge a través de la educación permanente. No está ligado al contexto institucional, sino que adopta una perspectiva holística más amplia que no se limita a la educación formal. Sin embargo, en el contexto individual es necesario comprender el efecto del envejecimiento en la capacidad de aprendizaje de las personas. Algunos autores indican que la adquisición de nuevas habilidades es más efectiva en la adolescencia temprana que en la vejez. Por otro lado, otros autores creen que si bien las formas de aprender se diversifican con el aumento de la edad, la capacidad de aprender permanece a lo largo de la vida.
Un concepto nuevo aparece, la agilidad de aprendizaje, definido como «la disposición y la capacidad del individuo para aprender nuevas competencias y desempeñarse en condiciones nuevas, difíciles o diferentes por primera vez». Sin embargo, la relación entre la edad y la agilidad de aprendizaje tiene visiones encontradas. Por un lado, se argumenta la disminución constante en la agilidad de aprendizaje con un impacto máximo en la agilidad mental en los grupos por encima de los 35 años, mientras que otros estudios indican una menor participación en la educación y el aprendizaje de actividades entre los alumnos mayores de 60 años. Por otro lado, un se ha constatado un crecimiento exponencial en el número de adultos mayores en la mitad de sus carreras profesionales que participan en la educación y que la ven como una parte de las actividades de la vida cotidiana. En definitiva, los paradigmas de la educación de adultos actualmente están cambiando de la educación a lo largo de toda la vida al aprendizaje a lo largo de toda la vida.
Se ha constatado que cuando los trabajadores seniors o más mayores perciben que su organización no discrimina la edad, tienden a tener una percepción positiva sobre su propia capacidad de aprendizaje. Los estudiantes mayores tienen mayor autoeficacia, están más motivados intrínsecamente, son más auto-dirigidos en entornos de aprendizaje en línea, mientras que los estudiantes más jóvenes obtienen mejores resultados en las pruebas de conocimiento.
Sin embargo, la percepción del aprendizaje afecta a la adopción de tecnología para el aprendizaje entre los adultos mayores. La tecnología de aprendizaje electrónico promueve la agilidad de aprendizaje y por tanto, las organizaciones deben adoptar las tecnologías de la información y construir una cultura de aprendizaje. Aquellas organizaciones que dominen el aprovechamiento de la tecnología para desarrollar la agilidad de aprendizaje conseguirán no sólo mantenerse por delante de la competencia, un sino también ser exitosas. No cabe duda de que la adopción de tecnología en las organizaciones fomenta la mejora de las habilidades, la actualización de las mismas y los aprendices ágiles. La destreza digital y la capacidad de aprovechar la tecnología para la aprendizaje son fundamentales para convertirse en un aprendiz de por vida ya que la adopción y el aprovechamiento del e-learning tiene un efecto positivo en la agilidad de aprendizaje de los estudiantes.
Para concluir una reflexión en torno a la educación on line y el aprendizaje a lo largo de la vida: «No discrimines la posibilidad de crecer personal y profesionalmente mediante formaciones en línea, busca aquéllas que desarrollen tu agilidad de aprendizaje, reten tu pensamiento y se encuentren a la vanguardia de las tendencias del mercado laboral». Te propongo dos formaciones de vanguardia que no puedes dejar de valorar porque ya tienen la preinscripción abierta para el curso 2022/2023:
- Curso Superior Universitario en Design Thinking, elige la modalidad (on line o presencial) una vez preinscrito y matriculado. Un nuevo modelo que combina al mismo tiempo las dos modalidades en las que los estudiantes on line interactúan, trabajan en equipo y desarrollan dinámicas con los estudiantes en el aula como si en ella estuvieran.
- Master en Agile Coach y Transformación Ágil de las Organizaciones. Un master único en el que no sólo se abordan todas las metodologías ágiles, sino que además aborda la adquisición de habilidades directivas para la gestión de proyectos de innovación, de equipos de alto rendimiento y de liderazgo efectivo.
«La edad no es una barrera. Es una limitación que pones en tu mente«